ROMERÍA DE VALME

La Virgen en su carreta hacia la Ermita de Cuarto en Bellavista

ROMERÍA DE VALME

Cortejo de carretas acompañando a la Protectora de Dos Hermanas

ROMERÍA DE VALME

Estampa de la Romería de Valme de 1959

ROMERÍA DE VALME

Francisco Jiménez ultima con nardos la Carreta de la Virgen

ROMERÍA DE VALME

Francisco J. Sánchez exornando su carreta

martes, 26 de octubre de 2010

Calles nazarenas con nombre propio (y 2): Soldados olvidados

Foto de recuerdo de soldados españoles

Hoy desde nuestro blog, vamos a darle un pequeño homenaje a tres heroicos personajes que han caído en el olvido y son casi desconocidos para muchos ciudadanos de Dos Hermanas. El recuerdo no puede ser más admirable para Fornet Domínguez, Mena Martínez y Sánchez Chacón, soldados caídos en la Guerra de Cuba de 1898 de los que el alcalde Antonio León Reyes  en 1920 dijo: "la única recompensa que pueden esperar los soldados que mueren en campaña, defendiendo la Patria, es un recuerdo de sus conciudadanos" y no fue para menos, ya que se les dedicó tres calles en su nombre en el popular barrio céntrico de San Sebastián.







                                                                                                         

sábado, 2 de octubre de 2010

Delator en una mañana gris

 A los que vivimos en la pausa

Tienes mal aspecto ¿mala noche, tal vez? Me miras con desprecio como si tuviera alguna culpa ¿Qué pasa? El día no promete ¿eh? Te lavas la cara pero no llegas a enjuagar tu cansancio y el humo de tu primer cigarrillo de la mañana nubla tus palabras, no se disipan las dudas. Alguna vez has pensado que la mirada es el espejo del alma ¡cómo si yo no lo supiera! Te miras en mí por tal de que adivine la sombra que te abraza en los días que te esperan. Anoche no recogiste la cocina. Es un desastre. Reconócelo. Tus heridas están en desorden. Lo sabes. Hay un puzzle de retales. No eres el mismo de hace dos días. Pones la radio. Tomas café y una tostada con mantequilla. El reloj rojo marca los segundos como pasos perdidos. Esperas. El teléfono no suena. Esperas. No llega la vacante. La sustitución mucho menos. Te pones el pantalón que más te gusta y la camisa que alguien te regaló por unos Reyes. Dan las 8 con los informativos. Coges las llaves y el curriculum que hiciste ayer en ordenador. Te renuevas en Arial a tamaño 12. "¡Papel mojado!" piensas mientras te marchas con la sombra a la ciudad, a otro sitio, lejos de mis indiscretas miradas.